Por Renato Estay, socio Líder Zona Sur de CCL Auditores Consultores
La nueva ley 21.713 sobre cumplimiento tributario, tiene por objetivo enfrentar la evasión, con medidas que buscan combatir la informalidad y mejorar el procedimiento declarativo de la elusión. Introduce medidas importantes en materias de responsabilidad empresarial como el concepto de Sostenibilidad Tributaria que se introduce al código tributario, con un foco intrínseco de moral tributaria por parte de los contribuyentes.
Sin embargo, la práctica nos indica que para combatir la evasión es necesario que los contribuyentes vean que sus impuestos son un real aporte a la sociedad, con dineros utilizados de forma eficiente. De esta forma, no sólo se debe atacar la moral del contribuyente, sino que es el Estado quien debe demostrar que administra y asigna eficientemente los recursos.
Lamentablemente cuando hay gastos desproporcionados en pago de hoteles, uso de vehículos o aeronaves estatales, financiamiento a fundaciones, etc. se produce un quiebre en este contrato social, ya que el deber de contribuir se ve dañado moralmente frente a un Estado que no se preocupa de ser eficiente en materia de asignación y control de los recursos.
