«Recaudar por la vía de alzas tributarias o nuevos impuestos no es el camino, porque impide que Chile recupere su capacidad de crecer», advierte Ricardo Mewes, presidente de la multigremial.
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Se acortan los plazos: esta semana está previsto que el Gobierno detalle su propuesta final de pacto fiscal, con una serie de compromisos respecto de los planteamientos que estarán contenidos en los distintos proyectos de ley del plan.
En ese marco, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, anticipó el diseño general de la reforma de impuesto a la renta, que es parte del pacto y que se conocerá en marzo 2024. El espacio de recaudación disponible para ese proyecto es de 0,6% del PIB.
«Lo que va a haber en marzo es un proyecto de reforma de impuesto a la renta, donde la tasa corporativa, o sea, la tasa de impuesto a las empresas, se va a reducir de 27% a 25%, y se va a compensar con mayor recaudación de parte de las personas y de las personas de mayores ingresos», dijo Marcel el domingo en la noche en CNN Chile.
Sus dichos abrieron un debate a nivel técnico y político.
Reacciones de economistas y tributaristas:
A nivel técnico, también se respaldó la rebaja corporativa, pero hay discrepancias en aumentar impuestos a las personas. A juicio de Javier Jaque, socio Líder de CCL Auditores Consultores “el alza en el tributo personal es un error, porque el Impuesto Global Complementario está relativamente alto y además existe mucha informalidad». Añade que hay una baja cantidad de personas que tributan por el Global Complementario. «También es incorrecto (cree) que las personas de mayores ingresos vayan a tributar, porque los grandes patrimonios han aplicado los impuestos sustitutivos de años anteriores. Por tanto, tienen ingresos no renta acumulados y van a retirar por muchas generaciones. Los que van a terminar pagando ese Impuesto Global Complementario son los profesionales”, sostiene.